El seísmo seguido de un tsunami desencadenó, además, una alarma nuclear en la central de Fukushima, ubicada a 240km de Tokio:
La primera noticia nos comunicaba la explosión del reactor 1 el pasado día 12 de marzo, provocando la exposición de los habitantes a altos niveles de radiación. Días después (14/3/11) la unidad 3 reventó como una olla a presión debido al contacto del vapor de agua con el uranio caliente (aun así la radiación en el área seguía manteniéndose dentro de los niveles permitidos). Ésta fue la más temida hasta el momento porque se produjo en uno de los reactores más modernos. Constantemente sigue siendo enfriado con el agua del mar, al igual que el primero, ya que su sistema de refrigeración no funciona.
El día siguiente amaneció con el estallido de la unidad 2, que puede acabar siendo la más problemática. La eléctrica propietaria, Tepco, anunció que había evacuado a los empleados que tenía en el reactor 2, y que solo dejó a los empleados que trabajaban en la refrigeración de la central. Además, reconoció que al menos 2,7 metros de las varillas de combustible no estaban cubiertas por el agua y que había vuelto a inyectar agua de mar. Esto implica que la mitad del uranio estaba sin refrigeración, el paso previo a la fusión del núcleo de la central. Ese mismo día se detectaron dos incendios en el reactor número 4, que se creía fuera de peligro al estar parado el día del terremoto. Como consecuencia, la piscina de combustible había sufrido daños.
Finalmente, según las fuentes que he consultado, los reactores 5 y 6 estaban en parada de mantenimiento durante el seísmo, pero esto no impidió que la temperatura de la piscina subiera, por lo que tuvieron que empezar a inyectarles agua.
A lo largo de estos días, unos cuantos hombres se prestaron voluntarios para intentar controlar los distintos reactores. Los E.E.U.U enviaron 50 toneladas de agua dulce para cubrir el combustible, pero tardará unos días en llegar a su destino.
Las distintas fugas de radiación han causado que los alimentos cultivados en la zona pudiesen estar contaminados. El gobierno ha advertido de este problema para que si la población compra comida sea con precaución. También se han retirado algunos productos al detectarse una radiactividad superior a los limites. Varias personas pertenecientes a la población nipona han sido contaminadas y ya han tenido que tomar pastillas de yodo.
El Ejecutivo japonés ordenó evacuar a los habitantes hasta los 30 kilómetros: "Que no salgan de su casa para no verse expuestos a ningún tipo de radiación. Pedimos que cierren las ventanas, no tiendan la ropa en el exterior y no utilicen sistemas de ventilación", dijo. Ya, miles de personas se han ido del país por miedo y otras muchas siguen en los aeropuertos para irse a otros lugares donde no tengan riesgo de radiación.
Para más detalles de los estados de los reactores podéis acceder a esta noticia del periódico El País:
En el siguiente vídeo podréis ver qué está pasando en los reactores nucleares: